¿12 de Octubre
"Día de la Raza" o del racismo ?
Cada 12 de octubre, al celebrar el "Día de la Raza", recordamos que en las naves de Cristóbal Colón y en las alforjas de los conquistadores llegó "el pluralismo político, la libertad y la protección que se prodigó a los indígenas".
Debemos recordar que en esas mismas naves, llegaron enfermedades mortales, que en esas mismas alforjas, traídas por la santa Inquisición, llegaron, el crimen y el terror y se robaron el oro y la plata que fueron a dar en las arcas de los empresarios de España, Italia, Holanda, y que suministró a Europa el esplendor de las monarquías.
Colón no descubrió nada nuevo, porque nuestra Abya Yala o Tahuantinsuyo -América- ya estaba culturizada por los pueblos originarios. Si se esgrimió la palabra "descubrimiento" fue para justificar la conquista de territorios ricos en metales preciosos, así como "Día de la Raza" para celebrar la matanza de indígenas por los españoles.
Enseñar que la conquista de América fue un cruce pacífico de culturas o un momento de la llegada de la civilización, lejos de pintar un panorama esclarecedor y verídico, muestra un escenario irreal y poco esclarecedor.
Ese descubrimiento regocijó a los españoles, portugueses, ingleses, franceses y holandeses, traficó con seres humanos a quienes convirtieron en esclavos, sometieron a nuestros indios a una transculturización infame, en nombre de Dios y la madre patria.
La gesta de Cristóbal Colón en nombre de la fe cristiana que nos inculcaron los conquistadores ya fue denostada, hasta por el propio Papa.
Nadie decía una palabra sobre las depredaciones y el arrasador genocidio cometido contra los indígenas ; sobre las nuevas creencias y costumbres impuestas a sangre y fuego.
Una suerte de supremacía del hombre blanco que, desde el 12 de octubre de 1492, se refleja en el racismo latente que habita en el subconsciente colectivo de América, donde muchos indígenas y negros cambiaron su identidad, cambiaron su lengua, cambiaron su nombre y hasta su vestimenta.
Aunque el negro vestido de seda, negro queda, y el indígena, así tenga el título de doctor y el apellido de europeo, sigue siendo indígena hasta la médula.
Esto es lo que nos dejó la conquista y colonización. La marginación social y racial de indígenas y negros, donde los criollos se convirtieron en los amos y señores de las tierras conquistadas, con derecho a gozar de ventajas y privilegios sociales y económicos, pero también con derecho a ser la clase dirigente.
¿Tenemos que celebrar cada 12 de octubre estas atrocidades ?
Cada 12 de octubre, al celebrar el "Día de la Raza", recordamos que en las naves de Cristóbal Colón y en las alforjas de los conquistadores llegó "el pluralismo político, la libertad y la protección que se prodigó a los indígenas".
Debemos recordar que en esas mismas naves, llegaron enfermedades mortales, que en esas mismas alforjas, traídas por la santa Inquisición, llegaron, el crimen y el terror y se robaron el oro y la plata que fueron a dar en las arcas de los empresarios de España, Italia, Holanda, y que suministró a Europa el esplendor de las monarquías.
Colón no descubrió nada nuevo, porque nuestra Abya Yala o Tahuantinsuyo -América- ya estaba culturizada por los pueblos originarios. Si se esgrimió la palabra "descubrimiento" fue para justificar la conquista de territorios ricos en metales preciosos, así como "Día de la Raza" para celebrar la matanza de indígenas por los españoles.
Enseñar que la conquista de América fue un cruce pacífico de culturas o un momento de la llegada de la civilización, lejos de pintar un panorama esclarecedor y verídico, muestra un escenario irreal y poco esclarecedor.
Ese descubrimiento regocijó a los españoles, portugueses, ingleses, franceses y holandeses, traficó con seres humanos a quienes convirtieron en esclavos, sometieron a nuestros indios a una transculturización infame, en nombre de Dios y la madre patria.
La gesta de Cristóbal Colón en nombre de la fe cristiana que nos inculcaron los conquistadores ya fue denostada, hasta por el propio Papa.
Nadie decía una palabra sobre las depredaciones y el arrasador genocidio cometido contra los indígenas ; sobre las nuevas creencias y costumbres impuestas a sangre y fuego.
Una suerte de supremacía del hombre blanco que, desde el 12 de octubre de 1492, se refleja en el racismo latente que habita en el subconsciente colectivo de América, donde muchos indígenas y negros cambiaron su identidad, cambiaron su lengua, cambiaron su nombre y hasta su vestimenta.
Aunque el negro vestido de seda, negro queda, y el indígena, así tenga el título de doctor y el apellido de europeo, sigue siendo indígena hasta la médula.
Esto es lo que nos dejó la conquista y colonización. La marginación social y racial de indígenas y negros, donde los criollos se convirtieron en los amos y señores de las tierras conquistadas, con derecho a gozar de ventajas y privilegios sociales y económicos, pero también con derecho a ser la clase dirigente.
¿Tenemos que celebrar cada 12 de octubre estas atrocidades ?
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